A pesar de que con frecuencia se utiliza el nivel de eosinófilos en sangre como marcador subrogado de inflamación eosinofílica en la vía aérea, la eosinofilia en sangre no siempre muestra la presencia de eosinófilos en tejido, lo que indica que existe heterogeneidad espacial en relación con la distribución de este biomarcador. De acuerdo con el estudio BREATHE, estudio transversal multicéntrico en vida real que reclutó a pacientes con asma y/o EPOC de cinco centros clínicos durante 2 años, la eosinofilia en el esputo sin eosinofilia en sangre estuvo presente en el 45% de los pacientes con asma leve a moderada y en el 35% de los pacientes con asma grave.1
Las biopsias broncoscópicas pueden proporcionar información sobre el proceso inflamatorio subyacente que afecta a las vías respiratorias, mientras que la seguridad de la broncoscopia en el asma grave (FEV1 <60% del previsto) ha mostrado ser aceptable en estudios previos.2
Este Webinar organizado por SEPAR y patrocinado por AstraZeneca consta de 4 charlas de actualización en utilidad, indicaciones, examen anatomopatológico de muestras e investigación en broncoscopia en asma grave por expertos en cada materia.