El estudio evalúa el mejor momento para administrar las vacunas frente a la gripe pediátrica para maximizar la efectividad. Al analizar los datos de 819.223 niños de 2 a 5 años que recibieron vacunas frente a la gripe entre el 2011 y el 2018 en los Estados Unidos, el estudio se enfoca en las tasas de diagnósticos de gripe entre estos niños según el mes en que fueron vacunados.
Los hallazgos clave incluyen que los niños vacunados en noviembre y diciembre tenían menos probabilidades de ser diagnosticados con gripe, lo que sugiere que el momento de la vacunación puede afectar la efectividad. El estudio también observó que el momento de la vacunación a menudo coincidía con las visitas de atención preventiva, que con frecuencia se programan alrededor del mes de nacimiento de un niño, lo que llevó a un patrón en el que los niños nacidos en octubre, que generalmente se vacunan en octubre, tuvieron las tasas más bajas de diagnósticos de gripe. Esto respalda la idea de que vacunar en octubre puede alinearse con las recomendaciones actuales para el momento óptimo de la vacunación.